Lúgubre sentimiento que deprime mis lamentos,
congruencia de palabras que pierden su significado,
sensaciones que se pierden por entre las alcantarillas,
conflictos que se ocultan entre la hipocresía cultural,
esperanzas efímeras que se pierden sin luchar,
me recuerdo como un ser sin sustento de lamento,
siento el pecho presionar mi alma y evitarla,
la respiración sin aire agita mis pulmones,
todo lo puedo, pero, nada lo quiero...
Preguntar por mí en el mundo, responder por mí en mi mundo...
Repito el grito incoherente de la angustia sin fundamento.
Recuerdo tu cuerpo quemado y hecho ceniza,
proyectos que se diluyen en el lagrimear del ojo,
siento perder fuerzas, ganas y deseos,
me pierdo entre el lamento perpetuo de la duda de sí.
Sujetarme al vacío es mi única opción,
caerme en el abismo que llama mi ser,
quemarme en el fuego quimérico del crisol del saber,
azul el cielo, gris mi ver, blanca la nube, negro mi ser.
Letras, sálvame, lenguaje, dime muchas palabras, cuestioname,
discurre, permíteme ser estas palabras para intentar creer en un vivir eterno y trascendente en ellas...
